lunes, 28 de junio de 2021

Un día como los demás o de cómo ser un superhéroe solo es cuestión de perspectiva

Opción 2.


Las siete de la mañana. Estás a medio vestir cuando le das un beso de despedida a tu marido antes de que se vaya al trabajo. Al darte la vuelta ves que tus hijos han decidido recrear un cuadro cubista con la mermelada y la mantequilla en la puerta de la nevera. La mujer moderna que hay en ti alaba su espíritu artístico, pero la otra, la que se parece cada vez más a tu madre, está a un tris de quitarse la chancla y mandarla a volar pasillo abajo. Por suerte, aún no eres esa mujer...

Te pasas veintidós minutos exactos intentando que tu hijo se meta en la ducha mientras por enésima vez le rehaces las coletas a tu hija. Han de quedar perfectamente simétricas, porque si no, vendrá el llanto. O sirena de bomberos, como prefieras, porque tu hija tiene unos pulmones que para sí los quisiera una cantante de ópera. Apenas te queda tiempo antes de salir para maquillarte un poco, cuando tu hijo te abraza por sorpresa. Te derrites ante el gesto cariñoso pero también te acuerdas de la madre que lo parió (tú, para que quede claro), porque tu niño tenía las manos llenas de pasta de dientes. Te cambias de falda a una velocidad pasmosa.

Cuando ¡por fin! están los tres listos y presentables en el coche, te encuentras atrapada en un atasco. Gritos, bocinazos, improperios… Para despistar a tus hijos, que están muy pendientes de las palabras 'extrañas' que ha gritado el señor del coche de al lado, pones la radio. Un camión cisterna ha volcado en la entrada del barrio de Somosierra y hay un embotellamiento que llega hasta la Avenida de los Príncipes. Se espera en cualquier momento la llegada de SuperHim para ayudar a mover el camión, pero, aunque no hay que lamentar heridos, ahora mismo está ocupado con un autobús que literalmente se ha comido la mediana en la autopista. Se te ocurren un par de adjetivos que no desentonarían en lo más mínimo con los del señor del coche de al lado…

Con tus hijos ya a salvo dentro del colegio —tarde, pero a salvo—, tiras como una loca para el trabajo, donde, nada más entrar por la puerta, tu 'encantador' jefe te encasqueta veinte expedientes nuevos que deben estar listos y despachados antes de las dos. Evidentemente, hoy no tomarás café.

Cuando son las dos menos diez y estás terminando el último archivo —gracias al cielo—, y sueñas con poder ir al baño antes de hacértelo encima, aparece el 'experto en habilidades sociales y liderazgo' al que todos llaman jefe (sí, el mismo de antes) para pedirte el informe estadístico del trimestre anterior. Tú solo rezas para que tu vejiga aguante como una campeona hasta las cuatro.

Cuando recoges a tus hijos —tarde otra vez—, sales corriendo a las clases de natación para tu niña, y de taekwondo para tu niño. Tú das gracias al de arriba por las pequeñas mercedes, porque las dos actividades son en el mismo recinto. Eso te permite una hora de tranquilidad y reposo en el coche mientras esperas por ellos. Una cabezadita quizás, o un ratito de lectura pacífica de ese libro que llevas en el bolso y nunca lees... O mejor, un momento para solo tú y tus pensamientos... Eso si no te raptan las otras madres, ansiosas de compartir y difundir nuevos cotilleos y chismorreos. Pues no, hoy no tienes suerte.

Ya en casa, supervisas las tareas de tus niños mientras tienes un ojo en el potaje que estás haciendo para mañana. Luego la lavadora, la cena, la loza, los pijamas y el cuento obligatorio. Cuando tus ángeles duermen, crees, ilusa de ti, que ya has terminado por hoy. ¡Ja! La pila de ropa para planchar parece burlarse de ti.

Te acabas de sentar (bastante literalmente) cuando la cortina del balcón se mueve con una brisa que no hay. Es tu marido, que acaba de entrar por el balcón, porque este hombre no sabe usar las escaleras… Te da un beso antes de quitarse la máscara y la capa y tú le dices:

—¿Qué tal tu día?

Agotador —te responde él—. ¿Y el tuyo?

Como siempre —le dices, encogiéndote de hombros.

Pues mira que en cualquier momento nos cambiamos los papeles…

Tú sonríes y te muerdes el sarcasmo, y al final tan solo le dices:

Cuando quieras…

lunes, 21 de junio de 2021

El Segundo Convenio Colectivo de las Universidades Públicas Canarias

1. El Segundo Convenio Colectivo de las Universidades Públicas Canarias (2013) tiene como objeto establecer y regular las relaciones laborales entre las Universidades Públicas de Canarias y su Personal de Administración y Servicios Laboral (en adelante, PAS Laboral). Su ámbito de aplicación se limita, pues, al personal laboral de la Universidad de La Laguna (donde yo trabajo) y la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (y al de aquellas que puedan crearse en un futuro, siempre que se financien con dinero público), en todos sus centros de trabajo. Las partes que lo conciertan son las Universidades, representadas por el Rector de cada una de ellas, y el PAS Laboral, representado por los sindicatos mayoritarios y legitimados. 

Día de la firma pública, 8 de octubre de 2013.
En el centro, los rectores y sus gerentes; en los extremos, los representantes de las cuatro secciones sindicales.
Por cierto, solo una mujer…

2. La principal novedad de este segundo convenio (que sustituye al del 2000) es la actualización de su contenido en materias de género y de igualdad. Entre ellas, destacan las formas de conciliación, el trato al acoso y a la violencia de género y un nuevo título específico: “Igualdad de trato y de oportunidades entre mujeres y hombres”. Con el articulado de este título, las Universidades se ponen al día con el marco normativo de jerarquía superior (Ley Orgánica 3/2007, para la Igualdad Efectiva de Mujeres y Hombres y Ley 1/2010, de 26 de febrero, Ley Canaria de Igualdad entre Mujeres y Hombres): compromiso explícito al principio de igualdad de trato y no discriminación entre mujeres y hombres (como puede verse en la tipificación de faltas).

Se regula también el funcionamiento y participación de las Unidades de Igualdad; la elaboración, actualización, transversalidad y seguimiento periódico de los Planes de Igualdad; el derecho de información sobre igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres en la empresa (estadísticas desagregadas por sexo); las medidas para prevenir el acoso sexual y el acoso por razón de sexo; y los derechos laborales de las trabajadoras víctimas de violencia de género.

Mi intento según el método sueco de las 3R quedaría de la siguiente manera:

ROLES: Impacto positivo, porque reduce las desigualdades de género. Introduce actuaciones específicas en materia de igualdad y no discriminación, conciliación, acoso y violencia de género.

RECURSOS: El acceso a los recursos económicos, laborales y sociales es igualitario. La brecha salarial debería suponerse inexistente en este contexto, desde que las retribuciones y complementos son públicos y vienen estipulados en el convenio.

REPRESENTACIÓN: La representación femenina es casi nula. Entre las partes firmantes, ocho personas como se ve en la fotografía, solo había una mujer. Eso sí, esto es en la foto de galería. Es de suponer (pienso yo) que en las diferentes secciones sindicales haya habido una presencia más equilibrada, así como en aquellas otras entidades que hayan participado en la gestión, asesoramiento y redacción del convenio (como pueda ser la Unidad de Igualdad de Género de la Universidad de La Laguna, creada en 2010, al amparo del desarrollo normativo superior en materia de igualdad).

3. Como comenté en el apartado anterior, por fin aparecen políticas y medidas específicas para la igualdad del PAS Laboral entre mujeres y hombres. Supone esto, primero, el cumplimiento de la normativa vigente, y segundo, una modernización de un convenio obsoleto.

El pasado 8 de marzo, con ocasión del Día de la Mujer, la Rectora y la directora y subdirectora de la Unidad de Igualdad (sí, todas mujeres) presentaron los últimos avances de la institución en materia de igualdad de género, un diagnóstico estadístico desagregados por géneros y las iniciativas formativas y de sensibilización que se han puesto en marcha para mejorar la concienciación del alumnado, del PDI y del PAS (el vídeo, aquí).

Además, el pasado 11 de junio las universidades públicas canarias (la ULL y la ULPGC) han acordado trabajar de manera conjunta en materia de igualdad de género a partir del próximo curso académico 2021/2022. Este acuerdo surge a raíz del diagnóstico y debate en torno a los planes de igualdad impulsados y aplicados por ambos centros académicos durante estos años.

Las tres acciones iniciales que quieren promover de forma paralela las dos universidades canarias son la dotación de un equipo de apoyo y un presupuesto estable para las unidades de igualdad, la vigilancia del cumplimiento de los protocolos de acoso sexual, la conciliación de la vida familiar y laboral y el lenguaje en igualdad, así como el diseño de una "potente" campaña publicitaria que sensibilice a la comunidad académica sobre la importancia de la conciliación.

4. Entre las fortalezas de este convenio se encuentra la adopción de la perspectiva de género en las actuaciones relativas a conciliación y permisos; la igualdad normativa en derechos y obligaciones; el uso del lenguaje inclusivo; la no existencia de una brecha salarial desde que las retribuciones vienen dadas por convenio; la transparencia normativa y la transversalidad en los órganos de participación.

Entre sus debilidades, la dilatación en el tiempo de estos mismos órganos de participación, con reuniones semestrales, así como cierta carencia de indicadores cualitativos y cuantitativos e instrumentos de control en lo que respecta al PAS Laboral (con preferencia por el PDI).

Siguen existiendo denuncias de acoso, eso es cierto, algunas bastante públicas, y puede que en la práctica todo no sea tan bonito como lo pintan las estadísticas, convenios y reglamentos, pero considero que la ULL está trabajando bien en conseguir una igualdad efectiva, al menos desde mi percepción en el ámbito laboral, dotando a esta universidad de instrumentos y estrategias con los que combatir la desigualdad. Queda mucho por hacer, eso es cierto, pero los avances en materia de igualdad de trato, de oportunidades y no discriminación desde 2013 son innegables.

lunes, 7 de junio de 2021

Chana, "La Maestra"

1. Tuve la fortuna de vivir mi infancia entre el campo y la ciudad. En la década de los 70, Mala, en la isla de Lanzarote, era un pueblo pequeñito (perteneciente al municipio de Haría), dedicado a la agricultura de secano y a la cochinilla. Y en mis recuerdos siempre está la figura poderosa de Sebastiana "Chana" Perera, maestra de una escuela unitaria como tantas otras de la España rural. "La Maestra", la llamaban, con mayúsculas, como título de respeto. Chana era una de las pocas mujeres que no se dedicaba solo 'a sus labores' en aquellos tiempos, y su presencia, fuerte, vital, suscitaba admiración (y envidia) entre sus iguales en el pueblo.


2. Nacida en Mozaga (Lanzarote) también asistió a una escuela unitaria; el bachillerato hubo de hacerlo en la capital y tuvo que ir a Gran Canaria para estudiar Magisterio y, al terminar la carrera, comenzó la docencia. Obtuvo su plaza en Mala en 1971 y allí educó a sus niños antes de dar el salto a la política insular en los años 80; estuvo al frente de la Consejería de Educación y Cultura (creando el Plan Insular de Acción Sociocultural que estuvo vigente hasta hace poco) y trabajó en el proyecto de creación de la Feria Insular de Artesanía en las Fiestas de Los Dolores, que aún continúa en pie, más de treinta años después. Más tarde, llegó a ser la primera mujer en el archipiélago en presidir un Cabildo (entidad administrativa insular, entre municipio y provincia) (y durante décadas, la única). 

Pero volvamos a Mala. Allí, siendo "La Maestra", creó la Asociación de Vecinos, creó también el grupo de teatro Tinamala, consiguió (por pura persistencia) que el Ayuntamiento de Haría arreglara el colegio y lo ampliara con jardines, cancha de baloncesto y parque infantil (que, por cierto, no estaban vallados, y eran de acceso libre para todo el chiquillaje y juventud cualquier día del año), el embellecimiento de las vías públicas, la adquisición del terreno donde se edificó (mucho más tarde) el primer centro de salud del norte de la isla, el acondicionamiento de la piscina natural para disfrute del pueblo, revitalizó las fiestas de Las Mercedes... Más tarde, cuando su período político terminó, regresó a su plaza docente en Mala, y creó la Escuela de Padres antes de su jubilación y en 2003 fue nombrada Personaje Distinguido del Municipio de Haría.

Hoy, con más de ochenta años, Chana sigue activa, y es actualmente presidenta de la Asociación Milana, que trata de salvar la cultura de la cochinilla, que fue la principal economía del pueblo, y el paisaje de tuneras. Fruto de este trabajo es el Centro de Tratamiento e Interpretación de la Cochinilla (coloquialmente, el Museo de la Cochinilla), inaugurado en 2018, preservando así el patrimonio histórico y cultural del pueblo.




3. 
Ante todo, Chana es un referente cultural y social en la isla, uno de cuyos principales méritos ha sido visibilizar a la mujer en la política local. Ella abrió el camino —casi a codazos, soportando empujones— para las que vinieron después... 

Sin embargo, en mi opinión, Chana Perera hizo mucho más por las gentes de Mala. En un pueblo de pañoleta negra, donde los aires de la transición apenas comenzaban a sentirse, consiguió que hombres y mujeres se implicaran por igual en la vida del pueblo. Su papel como dinamizadora social, que trascendía su horario laboral, constituía para ella una forma de vida,  y que contagiaba a los demás. Funciones de teatro, playbacks, actividades infantiles y juveniles, una pequeña biblioteca escolar (un tesoro cuando aún no existía esa cosa llamada internet), asaderos, viajes de mayores (antes de que el Ayuntamiento viniera con el Imserso), asistencia para conseguir becas de estudios..., Chana lo hacía todo con una sonrisa. Yo recuerdo las fiestas del pueblo, con hombres y mujeres trabajando por la comunidad, hombro con hombro, y jugar en ese parque del colegio, con equipos de baloncesto mixtos, niños y niñas juntos. Bajo su manto, Mala vivió un boom en el que sus jóvenes tuvieron la opción de iniciar estudios universitarios, algo absolutamente nuevo e impensable veinte años antes. 

Puede que ella ni siquiera sea consciente de ello, pero Chana Perera cambió la vida de muchas personas, en ese pueblo que tanto ha amado. A unos, les abrió horizontes de futuro, y a otros, les cambió la forma de afrontar su presente.


4. Fuentes utilizadas:

Reto 4. La comunicación como herramienta

Sobre la falta de comunicación o participación Dentro del marco de los Presupuestos participativos de la Universidad de La Laguna 2021 , fue...